La noche te borró los ojos

Y levantó tu voz

Te tropezaste con las botellas

No había nadie en la plaza

Habíamos dejado unos papeles entre los árboles

Saqué del bolsillo una bolsa pegoteada

Hablabas cada vez más fuerte

Te contestaba cada vez más rápido

Nombrábamos unas bandas ruidosas de los setenta

Teníamos puestas unas ropas viejas

Pero el vino era caro

Unos discursos a los gritos

Ideas contra el capital

No había nadie en la plaza

La mano sostiene la botella, nunca se cansa

Las ideas revotan contra las casas

Y por la mañana

Es un escobillón en la cara

Lo que te despierta