miércoles, 17 de diciembre de 2014

Tengo un amigo
Si lo vieras
Él es el motivo de mi devoción
Es una piedra preciosa enorme, repleta de caras hermosas para quien quiera ver
Puede verse a través de sus traslúcidos critales
El centro
Un interior ay mamá!
Cómo describirlo en esta dedicatoria
Cómo acomodar la vorágine de sentimientos desenfrenados que me provoca
Es una llama de fuego
Como el sol de media tarde
Que permite que unx se entregue sin incomodarse jamás
Sin quemarse ni enfriarse
Es la temperatura ideal
Necesaria para mantener con vida los sueños
Ese calor que salva a lxs pequeñxs pajaritxs
Ese manto curativo solar
Al que siempre se necesita volver
Su centro
Si lo sintieras
Tengo un amigo, digo
Pero no lo tengo
El sólo formular ese círculo cerrado traiciona su alma
Tan amplia
Tan eterna
Digo, hay un amigo, una amiga
Que tan solo desde lejos
Mantiene mis secretos vivos
De un futuro
De mi realización
Con el calor que lo caracteriza
Y solo eso
Abrirse a ese compartir
Me revive una y otra vez
Me levanta de mis tumbas emocionada
Siempre la palabra deseada
Siempre el amparo desinteresado de quien estimula con un corazón que nunca vi
Si lo conocieras
Si te acercaras
Me entenderías
Y él es tan frágil, tan dudoso cuando quiere
Y yo lo siento
Viva por su amor
Y le digo
Nico vos sos todo, no tengas miedo
Qué hermoso este amor que siento
Qué hermoso que sos
Gracias por salvarme una y otra vez
De maneras tan indirectas y directas a la vez
Quisiera que te veas
Ese reflejo verdadero
Que despierta tanto, tanto amor
Y que nunca más te sientas solo
Porque nunca más me sentí sola
Gracias a ese cristal
Ese potrillo
Esa rosa

Esa llama suave y eterna de tu amor

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